jueves, 21 de enero de 2010

Arrancando lento

Igual que todo lo que sucede en mi país (¿ será contagioso? ), este año empiezo tarde y lentísima para postear. Pero bien, después del estirón de gato, le damos a lo más interesante y menos loco que he encontrado de información.

Hoy le dedicaré esta pequeña nota de inicio de año al premio Pritzker que no dibuja con computadoras...simplemente porque tiene un equipo completo que hace lo que a él le brota de su maravillosa materia gris. Como alguien me dijo ayer ( y honestamente yo no lo había visto de esta manera ), tiene "obreros" que le hacen el trabajo. Debo confesar que no es ni mi arquitecto, ni estilo favorito; pero la genialidad que tiene en el uso de las formas y los materiales es simplemente deliciosa ! y no puede dejar de reconocerse y celebrarse.



En esta ocasión me referiré a uno de los edificios que Frank Gehry diseñó y  que se abrió al público en el 2006. Se trata del complejo ciudad del vino para el viñedo Marqués de Riscal al norte de España. La idea fué renovar de manera dramática el viñedo, que había cambiado muy poco desde 1860, además de motivar el turismo a la ciudad con una edificación similar a su Guggenheim diseñado para la ciudad de Bilbao.




De acuerdo a Gehry, el edificio en su exterior refleja los colores del vino; con grandes paneles de titanio pintados en rosa que reflejan el burgundy  de Rioja, el plateado representa el papel que cubre el corcho y el dorado la malla que recubre todas las botellas del Marqués de Riscal. El criterio de simbolismo, imágen, color, proporción, escala, punto focal, carácter, equilibrio entre otros es utilizado de manera asombrosa por el arquitecto.




El peso del diseño era grande por no decir inmenso para el arquitecto Gehry. Una tradición de más de 100 años no es fácil de superar, sumándole el sitio en el que esta enclavado. La superficie del complejo está revestida en titanio y acero inoxidable. La "piel" de la edificación, cuelga en la fachada ,  como sostenido con alas metálicas, sobre una serie de gigantescas rocas blancas, material similar a otras edificaciones en el sitio; y un ascensor de cristal desciende a la bodega que posee cerca de 3,000 botellas.




El complejo además posee un  hotel de cinco estrellas, un exclusivo restaurante, un spa que ofrece "vinoterapia" museo de viticultura, tienda de vinos y jardines de lujo para poder disfrutar una copa de vino al aire libre.




El valor de la estancia es de 236 a 816 libras por noche en una suit.....por si se anima.


Como siempre he dicho, no se necesita ser un genio en el uso de softwares para dibujo con computadoras para hacer algo así. El genio de Frank Gehry radica en su cerebro, ( el cual es su mejor herramienta ! ) su imaginación y creatividad no tienen límites; este premio Pritzker usa el don que Dios le ha dado de manera espectacular y sencilla a la vez, ya que hace uso de una tradicional herramienta que vino al mundo con él...sus manos....como muchos arquitectos en la actualidad.


Saludos !

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